Mi filosofia


Frases propias y no tan propias...


Escribir es un acto que puede hacerse en todas partes, como el amor.
Deshacerse del miedo a ser diferente termina siendo generalmente una tarea complicada, no por eso tendremos que ocultarnos debajo de las piedras.
Es la sociedad la que nos obliga a callar todas esas cosas que a veces no quisieramos ocultar.
El amor es una simple manera de expresar lo que viene desde dentro de nosotros mismos y no importa a quien vaya dirigido ese amor pues este no tiene limites ni clasificación.
Quien discrimina está lleno de ignorancia, de temores.
Los jóvenes revolucionarios creemos y luchamos por defender la espontaneidad de nuestras ideas.
Ser jóven es vivir con la esperanza de que vendrá algo mejor, es tener la firmeza necesaria para lograr el cambio.
Todo sucede en instantes, y a veces esos instantes nos transforman por completo.
Poco a poco me he encontrado a mi misma, lentamente, entre tus manos.
Si el masoquismo implica fuerza, mi fuerza de amarte es puramente masoquista.
Destrozar las cadenas y mover los dedos para escribir todo lo que viaja por mi cabeza, cuantas ideas irónicas, cuantas absurdas imágenes que plantean situaciones increibles.
Cuando alguien llega a tu vida puede quedarse mucho o poco tiempo, toda la vida o un par de segundos, pero al final estuvo presente en ella y es parte de ella desde el momento en el que te has enterado de que existe.
Todos somos alguien. Todos somos parte de la vida de muchas personas.
La soledad en realidad no es estar solos, sino estar con nosotros mismos.
Una charla a medias es tan pobre como hablar con quien no quiere oir.
Esa enorme diferencia entre lo que se dice y lo que se demuestra es el "algo" que nos da la respuesta más concreta.
Ese momento en el que te das cuenta de las cosas y dices; "no quiero esto para el resto de mi vida"...
No existen las culpas, pero sí las responsabilidades.
Juzgar a los demás como malos no nos hace ser los buenos.
Todo comienza a tener valor al transformar las ideas en acciones.
Un acto de paz es el que se hace todos los dias cuando nos despertamos amando y respetando a la vida.
Un acto de paz es no perder la esperanza en nosotros mismos, la fe en nuestros propios actos.
Eso a lo que llamamos recuerdos son cosas que hicimos y no son para olvidar.
A veces me gustaría tener una maquina de escribir mental para no olvidar ningun detalle.